Jovencita asiática caliente muestra el coño y sus pequeñas tetas desnudas cuando está sola en casa grabando un video para su novio. Ella abre las piernas y comienza a tocar su apretado y húmedo coño. La cámara se acerca, capturando cada detalle de sus delicados rasgos.
«Hola, cariño», susurra al micrófono. «Espero que estés listo para esto». Sus dedos se mueven más rápido y sus gemidos se vuelven más intensos. Se pellizca los pezones, haciéndolos resaltar, pidiendo atención.
«Voy a hacer que estés muy orgulloso», continúa, «te va a encantar este vídeo».
Se inclina hacia atrás y busca un pequeño vibrador. Lo enciende y el zumbido cobra vida. Lo pasa por su clítoris y sus ojos se ponen en blanco.
«Oh, sí», sisea, «Eso es todo».
Ella comienza a montar el juguete, su trasero rebota arriba y abajo. Agarra sus tetas y las aprieta con fuerza, haciéndolas temblar.
«Mírame, cariño», dice, «me voy a correr muy fuerte para ti».
Aumenta la velocidad del juguete y sus gemidos se vuelven más urgentes. Gotas de sudor le caen por la frente y su respiración se vuelve más irregular.
«No puedo aguantar más», grita, «¡ya voy!»
Ella se desploma en la cama, agotada. Apaga el juguete y sonríe a la cámara.
«Eso fue para ti, cariño», dice, «espero que lo hayas disfrutado».
Ella se levanta y la cámara enfoca su trasero. Lo mueve, haciendo que sus mejillas se muevan.
«Y esto es sólo el comienzo», dice, «tengo mucho más que mostrarles».
Se acerca a una silla y se sienta. Se abre de piernas y deja al descubierto su coño afeitado. Coge un consolador y la cámara hace zoom en su culo mientras lo empuja hacia dentro.